lunes, 20 de febrero de 2017

Gracioso y pequeño anuro: el Sapo corredor

En este mes de febrero, en el centro peninsular, comienza a moverse el gracioso y pequeño Sapo corredor.
Siendo una especie que habita desde el nivel del mar hasta los 2.400 m de altitud, tiene muchos problemas para sobrevivir, con una alta mortalidad: muchos lugares, donde excava su refugio para invernar, son inundados por la estación húmeda; otros son atropellados por los coches en sus paseos nocturnos, cuando buscan a su reina de la noche, algunos son despojados de su hábitat, también están los mal vistos, como si fueran bichos raros, y para algunos "feos", por lo que no merecen vivir,...
Estos últimos días de invierno, desgraciadamente, vengo observando que hay una gran mortalidad en carreteras y caminos. Para muchos de ellos ha sido su última ronda.  

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